El clima de las Islas Canarias es subtropical y da lugar a una enorme diversidad biológica, que junto a la riqueza paisajística y geológica, justifica que todas sus islas contengan reservas de la biosfera de la Unesco y otras zonas declaradas Patrimonio de la Humanidad. Estos atractivos naturales, el buen clima, su gastronomía y playas hacen de ellas un paraiso muy demandado, siendo visitado por casi 12 millones de personas al año. Canarias es la segunda región española que mayor número de turistas extranjeros recibe.

El Hierro no se identifica con el concepto de turismo de masas, y según sus habitantes debe de mantenerse así. La dificultad del acceso y la ausencia de grandes playas la hace menos atractiva para el turismo familiar. Bajo el eslogan "Isla de la tranquila diferencia" atrae visitantes en busca de calidad, relax y naturaleza.

Fuerteventura se ha dotado de grandes complejos hoteleros y zonas turísticas que han dado un impulso notable al sector servicios. Es un destino muy recomendado en las categorías de Naturaleza (conservación, contacto, ecología, paisajes y gestión de ruidos y luces) e Identidad (cultura, territorio, tradición, identidad autóctona, hospitalidad y satisfacción), esforzandose por ser un destino turístico sostenible.

En Gran Canaria el gran motor económico es el turismo, fundamentalmente de playa; aunque en los últimos años ha experimentado un auge del turismo rural, así como el de golf, deportes acuáticos, senderismo, ciclismo y salud, con gran calidad en sus servicios, actividades y establecimientos.

La Gomera gracias a su imagen como isla "virgen" del turismo de masas y con una naturaleza y paisajes exuberantes, se ha convertido en uno de los destinos de referencia vinculados al senderismo y la naturaleza.

La Palma es hoy día un lugar tranquilo con poco turismo, donde se ha implantado el Turismo Rural, basándose en la remodelación y modernización de casas antiguas para convertirlas en casas de huéspedes, respetando la arquitectura tanto interior como exterior. Cada día se toma más en cuenta la necesidad de evolucionar hacia un turismo sostenible y la mayoría de sus turistas lo hacen buscando un destino diferenciado basado en pequeños hoteles (rurales) e infraestructuras de ocio integradas en el paisaje y respetuosas con el entorno.

Lanzarote es más que un destino turístico de buen clima y playas, en donde el paisaje agrícola, la naturaleza volcánica, la idiosincrasia del isleño, el arte y la arquitectura tradicional se combinaron para crear una marca turística genuina. La isla ha sabido dotarse de una red de centros en los que arte y naturaleza se fusionan para seducir al visitante extranjero, aunque la hegemonía la tiene el turismo y sus actividades asociadas (comercio, hostelería, etc).

Tenerife es el principal destino turístico en las islas con visitantes en busca de sus playas, su variada oferta cultural y su animada vida nocturna; además es destacable el papel que tiene las actividades relacionadas con la realización de eventos, reuniones y congresos, siendo un receptor de primer orden.